Estamos comenzando el décimo mes del año. Hay algunas acciones muy significativas vinculadas a la modificación de la ley educativa uruguaya. Sabemos que es una deuda pendiente y necesaria la adaptación a los nuevos tiempos en el contexto complejo y cambiante que nos toca vivir.
Uruguay se ha destacado por la calidad de su gente y su nivel de educación, que se manifiesta en actitudes y formación intelectual y cívica de los ciudadanos. No es casual que el deterioro cultural que se percibe a nivel global, también nos alcance como sociedad, para ello debemos estar alerta para corregir, y no ser arrastrados por la ola.
En cuanto el gobierno se puso en marcha para modificar la perimida ley enciclopedista en la que nos hemos formado a través de tanto tiempo, comenzaron a sonar las protestas de aquellos que siguen creyendo que no se debe cambiar nada para que cambie algo…
Dos actos que demuestran cómo cambiaron los tiempos y las formas de manifestarse equivocadamente. Las primeras actitudes de manifestantes en una protesta en el interior cara a cara con el Presidente, esbozaron epitafios y agravios de los más diversos, que lamentablemente fueron mostrados en todo el país por televisión. Un grupo de manifestantes convocado, como docentes…
En otra actitud de provocación manifiesta, en el cerro de Montevideo, un Móvil del estado nacional que utilizaba el ministro de educación Robert Silva fue roto, apedreado y maltratado también, por manifestantes que no están de acuerdo con la reforma que se está gestando.
Por suerte el gobierno en este último caso se expidió al respecto y el ministro aseguró que la reforma se hará de cualquier manera, que serán llevados a la justicia quienes produjeron los daños al móvil ya que es un bien del estado y que el o los responsables pagarán por su proceder.
Alguien dijo una vez “la educación y las buenas actitudes comienzan por el hogar y continúan en las aulas”, la educación es fortuna, fortuna que no se pierde. Claro está que frente a esas aulas deberá haber docentes formados y actualizados, acordes con las demandas del sujeto en formación que satisfagan las demandas necesarias y NO para propiciar la degradante brecha cultural.
Bienvenido Octubre con aulas abiertas y bulliciosas y con la esperanza que lo mejor, se construye día a día…
La Dirección.
