Seguidores de Jair Bolsonaro de extrema derecha, tomaron el Congreso, entraron a la Corte y al palacio de Planalto. Los manifestantes se concentraron en el Cuartel General del Ejército, en Brasilia, y descendieron hacia la Esplanada de los Ministerios hoy domingo por la tarde.
Protestan contra Lula da Silva y reclaman la intervención de las Fuerzas Armadas, para destituir a Lula Da Silva, presidente electo recientemente. Los grupos bolsonaristas están integrados por militares, exmilitares, y extremistas de derecha que, desde la derrota electoral, claman por un golpe de Estado. El presidente no se encuentra en Brasilia, porque pasa el fin de semana en San Pablo, y hoy domingo se desplazó a Araraquara, en el interior del estado, para supervisar los daños causados por las lluvias en la región.
Las imágenes publicadas en las redes sociales por los seguidores de Bolsonaro dan cuenta de destrozos en el interior del organismo legislativo saqueando butacas, y destruyendo diferentes mesas y sillas, además de cuadros y decoración del interior del Congreso. Se reportaron además, destrozos en el interior de una capilla próxima a la sede de la Corte Suprema. Allí, las personas arrojaron papeles, bombas de humo y rompieron las ventanas.
El exministro de Justicia de Jair Bolsonaro, Sergio Moro, se expresó a través de su cuenta de Twitter y repudió el accionar de los desestabilizadores.
En la sede de la Corte Suprema los manifestantes rompieron los ventanales, con piedras y objetos contundentes. Pintaron con grafittis las paredes exteriores y por el humo en el interior, producto de bombas de estruendo, se activaron los aspersores contra incendios.
